Lo siento… ¿Te cuesta decir estas palabras?

Decir lo siento en muchas ocasiones no es tarea sencilla. Conseguir el perdón de la persona a la que hemos o creemos haber dañado puede costar…y mucho.

Saber disculparse supone un principio de responsabilidad personal. En ocasiones estas palabras resuenan en nuestra cabeza pero ya sea por testarudez u orgullo, muchas personas se resisten a liberarlas de su alma. Para resolver una situación incómoda necesitamos cierta estabilidad emocional que nos compromete en ocasiones, con nuestro propio sistema de valores.

Tener una autoestima fuerte y sana puede hacer que el hecho de decir estas palabras sea mucho más sencillo de lo que puede parecer. Recuerda que puedes descargar de manera gratuita mi ebook : ``Como tener más autoestima que Wonder Woman´´, donde vas a poder encontrar todas las claves para fomentar esta gran virtud.

Como es conocido, en ocasiones resulta más sencillo decir lo siento a una persona que apenas conocemos que a una persona querida, por contradictorio que pueda parecer .¿Por qué ocurre esto? Precisamente disculparse con una persona amada nos compromete en cierta manera, sin embargo disculparse con una persona que apenas conocemos no nos toca profundamente y en ocasiones esas disculpas son meras palabras que se escapan por tu boca.

¿Qué dice la ciencia sobre disculparse?

Como en el caso indicado con anterioridad, una disculpa ``sin alma´´ y vacía, no solucionara nada y puede incluso lastimar más a una la relación. En ocasiones podemos sentir que estas simples palabras van a sanar todas las heridas y esto no siempre es así.

Asumimos que pronunciar ``lo siento´´ tiene el poder suficiente para solucionarlo todo. Como si se trataran de palabras mágicas que de un golpe acaban con todo mal.

Veamos un ejemplo:

Cuando un niño adquiere el conocimiento del perdón por parte de los padres, suele decirlo sin saber exactamente la consecuencia de sus palabras, y acaban por disculparse de  todo, sin saber muy bien porque. No solo debemos educar a nuestros hijos para que repitan las palabras ``lo siento´´, debemos formarlos en valores y en inteligencia emocional para que realmente, conozcan el significado de estas dos palabras.

Existe una investigación de dos grandes figuras de la piscología como son Roy Lewicki y Beth Polin que evidenciaron que no todas las disculpas son efectivas de la misma manera.

Existen 6 elementos que deben tener para que sean realmente eficaces. Veámoslos.

6 maneras de aprender a disculparse.

Se sincera contigo y con los demás:

Si no sientes lo que dices, no lo hagas. Si una persona realmente quiere ser perdonada todos los que lo rodean lo van a sentir así. No vale convertirnos en actrices por unos instantes y hacer el papel de nuestras vidas. Haz que tus sentimientos y tus propias emociones sean fieles a tus palabras.

Explica lo ocurrido y como te sientes.

Un perdón vacío no cambia nada. Explica cómo te sientes y porque te arrepientes de haber hecho o dicho esas palabras. Habla con claridad sobre lo ocurrido y sobre que vamos a hacer para buscar una solución.

No culpes a los demás de tus actos

Si has cometido un error, asúmelo. No podemos pasarnos la vida siendo víctimas de una causa que únicamente nos repercute a nosotras mismas. Debemos dejar de culpar a los demás por las  cosas que solo nos implican a nosotras de manera individual.

Pide perdón asumiendo que todo lo ocurrido se debe a tu comportamiento.

No esperes recibir nada a cambio

Hay ciertas personas que usan la disculpa para pedir algo a cambio. Esto es una actitud muy infantil que puede causarnos muchos daños, tanto en nuestra autoestima como en la calidad de nuestras relaciones personales.

Ponte en el lugar de la otra persona

Nunca podrás disculparte realmente si no trabajas con tu empatía personal. Pedir perdón no solo explicarse y exponer lo que ha pasado. Debemos aprender a escuchar a la otra persona siendo capaces de ponernos en su lugar. Si aprendemos a escuchar desde el corazón tendremos muchas batallas ganadas de antemano.

Pide perdón, desde el fondo de tu alma.

Se consciente de lo que supone pedir perdón. Analiza la situación, no busques culpables e intenta solucionar el problema si aún se puede. Nunca uses las redes sociales o el móvil para hacerlo. Esto puede quitar toda la credibilidad a tus palabras.

No eres responsable de lo que pasa después

En ocasiones aun pidiendo disculpas con todo tu corazón y empeño, obtenemos una respuesta negativa. No te culpes más. Tú has pedido perdón desde tu ser y has desnudado tu alma ante esa persona.

Debes saber que existen personas que andan batallando en una lucha constante consigo mismas, y en esa lucha no hay cabida para el perdón. Recuerda siempre que es su batalla, no la tuya.

Por ello, si no has obtenido el perdón que deseabas tras emitir esas dos grandes palabras de poder, libérate. Tú ya has hecho lo correcto.

Como habéis visto el hecho de disculparse no siempre es fácil. Al menos perdonar desde el corazón y teniendo consciencia realmente de esas palabras. Sin embargo, una vez empieces a saber cómo pedir disculpas de manera adecuada, todo será mucho más sencillo.

Recuerda que es vital tener una autoestima sana y estable para realizar cualquier tipo de acto de disculpa o perdón. En mi ebook: ``Como tener más autoestima que Wonder Woman´´ Vas a poder encontrar todas las claves que necesitas para ello.

Perdonar es también un arte, así que seamos las mejores artistas posibles.