¿Tienes pensamientos desagradables y no sabes qué hacer con ellos?

Es común que a lo largo del día y la cantidad de pensamientos que tenemos, entre todos ellos, surjan pensamientos desagradables.

La cuestión es: ¿Qué haces tú cuando este tipo de pensamientos se amontonan en tu cabeza?

Una de las cosas que más te puede ayudar a la hora de controlar y cambiar este tipo de pensamientos, es el de tener una autoestima positiva que te ayude a hacer frente a estos pensamientos y te asegure la fuerza interior para hacerlos frente.

En mi ebook:``Cómo tener más autoestima que Wonder Woman´´,podrás encontrar las claves para fortalecer tu autoestima y conseguir dominar este tipo de pensamientos.

Los pensamientos desagradables pueden venir a nuestra mente de diferente manera. Pueden ser a modo de imágenes, palabras o recuerdos de nuestro pasado. Estos pensamientos tienen en su base miedos, temores o dudas que no hemos sabido solucionar en su momento.

Lo que está claro, es que son pensamientos que no nos reportan buenas energías, son pensamientos negativos que pueden verse como angustiosos y no nos dejan centrarnos en el aquí y ahora.

¿En qué consisten los pensamientos?

La mente es como una gran productora de películas, una máquina que viaja al pasado sacando de él todo lo que en ese momento le interesa o adentrándose en un futuro incierto. Constantemente nos pone en situaciones que aún no han ocurrido y quizás ni siquiera ocurran.

En función de nuestras experiencias, pueden adoptar diferentes versiones, y es en las versiones negativas donde encontramos esa ``piedra en el zapato´´

Pensamientos Versus experiencias

La experiencia ha sido uno de los grandes hitos de la humanidad, con ella aprendimos todo lo necesario para sobrevivir y seguir manteniéndonos firmes ante las diversas dificultades que han podido aparecer.

Desde el momento en el que el ser humano tomo la experiencia y la transformo en diferentes símbolos hemos sido dominados por según qué tipo de función o pensamiento, buena o mala.

¿Cómo podemos acabar con los pensamientos desagradables?

Queremos controlarlo todo y esto, incluye nuestros pensamientos. Sin embargo, podemos darnos cuenta que cuanto más intentamos liberarnos de ellos, más fuertes se hacen y más nos cuesta dejar de atenderlos. Esto puede derivar en ansiedad, estrés o incluso depresión.

Veamos cómo trabaja la mente.

Por un minuto debes cerrar tus ojos. Puedes pensar en lo que quieres salvo en una cosa: Un elefante rosa.

Comencemos.

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¿Ha aparecido el elefante rosa en escena?

A no ser que tengas un control magistral de tu mente, lo más posible es que hayas visto al elefante rosa bailar, pasear o hasta comerse un pastel.

Es totalmente normal.

Este tipo de pensamientos se hace más fuerte cuando más quieres que se vaya.

¿Qué hacer entonces?

Observarlos.

Observa cómo te sientes cuando estos pensamientos vienen a tu cabeza como si fueras un espectador de una película. No te identifiques con ellos.

De esta manera tu ansiedad se verá reducida.

Otras técnicas para reducir pensamientos desagradables.

Te voy a enseñar una serie de técnicas de Daniel Weber, un reputado psicólogo que consiguió ayudar a muchas personas a reducir su ansiedad ante pensamientos desagradables.

Distracción enfocada:

Es una de las técnicas más comunes que todos usamos cuando uno de estos pensamientos entra en nuestra mente: Distraernos con algo.

Aunque funciona, los estudios demuestran que no vale con distraerse con todo lo que parezca delante de ti. Elige ver la tele o leer un libro, pero no hagas demasiadas cosas al mismo tiempo.

Pospón el pensamiento:

Como ya sabéis intentar suprimir el pensamiento, lo hará más fuerte. Sin embargo posponerlo para más tarde es un hecho que ha demostrado ser altamente eficaz.

 Algunos estudios sugieren que las personas encuentran que esto funciona como una forma de dejar de lado la supresión de pensamientos. Así que guarda todo tu malestar hasta la hora agendada.

Terapia paradojal:

Este tipo de terapia, en lugar de suprimir un pensamiento repetitivo busca centrarse en él. Y es que, centrarse en un pensamiento que te perturba y analizarlo puede ayudarte a que se vaya.

Esta terapia está basada en la Terapia de Exposición y puede ser útil en pensamientos obsesivos o conductas compulsivas. Siempre y cuenta se haga con medida y llevando un control.

Aceptación:

Existe un estudio que muestra que tal como he comentado, aceptar los pensamientos negativos en lugar de batallar con ellos, logrará mitigar la ansiedad asociada.

 “Luchar con el blanco de tus pensamientos es como luchar en la arena movediza. Quiero que mires tus pensamientos. Imagina que están saliendo de tus oídos en pequeños letreros sostenidos por soldados marchando. Quiero que permitas a los soldados que marchen en frente tuyo, como un pequeño desfile. No discutas con los letreros, ni los evites, ni los hagas desaparecer. Solo míralos marchar” (Marcks y Woods, 2005, p. 440).

Meditación:

La meditación es algo muy similar a la aceptación. El Mindfulness promueve una actitud de compasión y no crítica hacia todos los pensamientos que vengan a tu mente. Esto puede ser una técnica muy útil para tratar de controlar los pensamientos que te desagradan y no sabes cómo manejar.

Escribe sobre ellos:

Escribir de manera expresiva sobre tus sentimientos y emociones tiene beneficios no solo para la salud física sino también para la salud mental.

Busca un diario o unos papeles y cada vez que vengan a tu mente estos pensamientos, escribe cómo te sientes. Deja que tu mano vuele libre y exprese todo lo que tienes dentro.

No existen fórmulas mágicas para alejar los pensamientos desagradables de tu cabeza. Es cuestión de adquirir unos hábitos mentales sanos y entrenar tu cerebro como si de un musculo se tratase.

Para que todas estas técnicas funcionen la seguridad en ti misma debe ser la base de todas ellas. En mi ebook: ``Como tener más autoestima que Wonder Woman´´ te enseñaré las claves para ello.

Suelta el control, Acepta y fluye.